“La juventud de un ser no se mide por los años que tiene, sino por la curiosidad que almacena” (S. Paniker)
“Si nos podemos reír de los malos momentos, serán más digeribles, o sea, si no nos emburramos de cólera y somos capaces de enfocar la atención en otros aspectos que también son reales”
Tras una conferencia sobre “Medicina y humor”, aparecieron cartas al director que le ponían por las nubes como médico y cura. Me dijo: “Oye, Germán, estoy preocupado… Me están diciendo cosas que solo se dicen cuando uno está muerto”
La risa es la mejor medicina. Eleva el ánimo y alivia preocupaciones y angustias. Vamos a necesitar humor. Y la creatividad, como el humor, está al alcance de todos, no solo de los genios o de los más graciosos
Quino, en una tira de ‘Mafalda’, nos presenta a Felipe, que está haciendo un avión de papel. “¿Por qué tantas mediciones?”, le pregunta Miguelito. “Porque quiero que este avión me salga bien”. Y Miguelito contesta: “Yo lo que quiero que me salga bien es la vida”. ¿Y cómo se hace eso? Aprendemos.
El sentido del humor es una de las primeras víctimas del alzheimer, pues va desapareciendo a medida que éste progresa. Fomentarlo es gimnasia mental y genera pensamientos positivos, más saludables que los negativos
“El sentido del humor nos ayuda a reírnos de nosotros mismos y no creernos únicos ombligos del universo, a reír juntos para poder convivir en paz”
Neurociencia, humor y risa. Tres términos que combina a la perfección Germán Payo a lo largo de su último artículo. Sin duda, las neuronas dan ‘juego’ para sacar más de una sonrisa.
“Afrontar esta aventura de morir nos ayuda a vivir y a reír, mientras podamos…”
Para Germán Payo, “es poner tus ideas en un lugar donde otros las pueden ver, ofrecer tu punto de vista, probar tu capacidad de persuasión, ingenio, estilo y tu don de suscitar interés o polémica”