Los salarios de los facultativos siguen arrastrando desde 2010 el ‘tijeretazo’ del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a los empleados públicos, con recortes que rondan el 25%, en una profesión que debería considerarse de riesgo, tener un modelo retributivo propio y avanzar hacia lo que se cobra en los países europeos de nuestro entorno